lunes, 14 de junio de 2010

Valorando la vida

Cuando alguien tiene una vida normal, común y silvestre, a veces uno no goza cada momento como si fuera el último o simplemente no le da importancia a la familia, amigos y a otras personas que uno quiere. Entonces cuando se está cerca a la muerte uno ve, en breves segundos, toda tu vida y ve a las personas que quiere y a quienes nunca debió herir. Así es la vida: en un segundo toda tu vida puede cambiar debido a las circunstancias del destino, un destino que está escrito y que algunos quisieran conocer y otros tantos no, pero que su curso es difícil de cambiar y uno solo debe aferrarse a la fe y esperanza que el destino quiera o no se den las cosas que más queremos.

En ese momento, en el que estamos por morir, vemos nuestra vida y vemos todas las cosas ya sean buenas o menos buenas que alguna vez hicimos y a personas quienes realmente nos importan. Y hay alguien a quien vemos durante más tiempo en esa ráfaga de recuerdos y nos damos cuenta que esa persona es muy importante y que desearíamos haber hecho las cosas mejor para con esa persona y haber evitado otras y que no guarde resentimientos ni nada negativo hacia uno. Entonces, finalmente entendemos que queremos seguir viviendo para buscar a esa persona y decir lo siento y espero nunca guardes malos recuerdos. Lo único que nos esperanza para seguir viviendo es remediar las malas acciones a tiempo y buscar ser mejores personas. A veces es posible pero a veces esa posibilidad se queda en eso: solo una posibilidad. Uno debe agradecer a la vida por cada momento y hacer lo correcto siempre y no esperar una situación de vida o muerte para darse cuenta que uno tiene aún cosas por hacer.

Nadie puede comprar la vida, ni los amigos, ni nada. Uno obtiene la vida por algún motivo y uno de esos motivos puede ser que tienes que hacer sentir especiales a otras personas y debemos realizar esta acción o a veces dejar que esta acción nos la hagan personas que buscan hacer de nuestra vida algo especial. No se mal interprete que esto se deba esperar siempre, solo que a veces hay personas que ven en otras cosas que uno mismo no ve y entonces debemos dejar hacerlo. Asimismo, se debe buscar hacer lo mejor y no lo bueno y esto es valorar a las personas en todo aspecto y no esperar una situación de la que nuestra vida dependa para empezar a realizar lo mejor que podemos hacer y mostrar al mundo.